Columnas

Catalunyapress: La inigualable Argentina: elecciones presidenciales 2023

Sorpresa para muchos –no para todos- fueron los resultados electorales de esta 1ra.vuelta presidencial del pasado domingo 22 de octubre. El candidato de la coalición peronista, Sergio Massa sobrepasaba ampliamente al candidato de la extrema derecha, Javier Milei.

Los resultados entregados por las autoridades de la Dirección Nacional Electoral (DNE), eran insospechados para muchos que creían que el candidato anarco capitalista se impondría fácilmente en esta vuelta inicial de las presidenciales. S. Massa alcanzaba el 36,68%; J. Milei, un 30%; P. Bullreich, un 23.8%; J. Schiaretti, el 6,78% y la candidata de la izquierda argentina, M. Bregman un 2,7%. Una diferencia notable es la comparación electoral de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 13 de agosto y de esta 1ra. vuelta entre los dos candidatos que pasaron al balotaje. Milei en las PASO obtenía un 29,86%, luego en la primera ronda presidencial llegaba al 30%, por su lado, Massa en las PASO alcanzaba el 27,28% y en la elección del 22 de octubre elevaba su votación al 36,68%. Notable diferencia por parte del candidato de Unión por la Patria en comparación con el candidato ultraderechista de La Libertad Avanza. Sin lugar a dudas, los grandes derrotados de estos comicios serían Bullrich, de la Coalición Juntos por el Cambio (JxC), que contaba con el apoyo del ex presidente M. Macri, que logra un discreto 23,8%.

Un dato no menor e importante, fueron los comicios, tanto de la Cámara de Diputados y de Senadores. En Diputados el peronismo queda con 107 bancas de 118 que antes tenía; JxC obtiene 94 diputados bajando de 116 bancas y; la ultraderecha sube de 3 bancas a 38. En Senadores, el peronismo obtiene 35 bancas; JxC obtiene 24 y; la ultraderecha subía a 8 senadores. En síntesis, ninguno de los bloques tendrá el control del Congreso, pero el peronismo será la primera minoría en ambas cámaras. Para todo tipo de proyectos enviados por el Ejecutivo se tendrá que negociar entre las bancadas. En este escenario un gobierno de Massa podrá tener mejores posibilidades de negociar y sacar adelante sus iniciativas, que un hipotético gobierno de Milei, que, por la propia verborrea agresiva y denostadora, ahuyentará a posibles aliados en el parlamento.

Los resultados, de esta 1ra. vuelta presidencial en Argentina, trajeron tranquilidad y alegría. La sociedad argentina le puso freno a la desaforada y violenta campaña del candidato de la ultraderecha. Tal como lo señala la fundadora de Latino barómetro y MORI Chile, Marta Lagos, en un chat de debates y opiniones políticas: Ojo que Argentina no es cualquier país de la región. Es uno de los cuales tiene la sociedad más democrática, más abierta, con alto capital social y una gran clase media que puede patear el mundo dándole el triunfo a Milei o bien patear a Milei. La incomparable Argentina.

 

También en los países de América del Sur, en las democracias de la región y, en particular para nuestro país, la tranquilidad campeó. Según el ex embajador de Chile en Argentina, Milei es un tipo descontrolado, antichileno y que defiende una seguridad nacional de hace 40 años, con privatizaciones y una política de prescindencia del apoyo a los sectores más pobres. Se respiró tranquilidad y esperanzas en el ejemplo argentino, el cual, a lo menos en estos resultados, enseñaba que se podía vencer a los movimientos y partidos ultraderechista y autocráticos.

Alentados por las PASO, muchos analistas argentinos/as y extranjeros/as daban como ganador -incluso algunos, en primera vuelta- al candidato de la ultraderecha. No tan solo erraron muchas encuestas, también aquellos analistas y expertos que de manera muy superflua intervienen en las redes sociales y medios de comunicación, diarios y TV, marcando supuesta “sabiduría” y dando por ende fenecida a una de las corrientes políticas más histórica y entroncada de la Argentina, el Peronismo. Se confirmó, con esta “sorprendente” Argentina, lo poco que conocen estos analista y expertos a esa fuerza política de más de 70 años, la raigambre que ésta tiene en el pueblo argentino, en la intelectualidad, en la cultura, en el mundo sindical particularmente y en el social. El movimiento peronista en sus diversas expresiones es parte insoslayable de la historia de la política nacional, querido y odiado, como también perseguido. Ha sido venerado y denostado en su larga trayectoria.

 

El candidato Massa remontó con una estrategia política muy inteligente el resultado de las PASO convocando a amplios sectores políticos y sociales, apareciendo en los debates presidenciales, precisamente como un líder político maduro, sereno y con propuestas entendibles para el votante, muy diferente a lo vociferante y agresivo de Milei. De esta manera, se situó por más de 6 puntos por sobre el candidato de la extrema derecha en los comicios recientes. Cómo argumentan referentes de la política chilena –lo más pocos- ganó la política y no la economía en esta votación. Puesto que, supuestamente no se comprende que gane un candidato, ministro de economía de un gobierno de desempeño muy discreto, con una inflación de 130%, 40% de pobreza y extrema pobreza, con un déficit fiscal alto, con problemas de corrupción, etc. Por cierto, la elección del balotaje que se llevará a cabo el 19 de noviembre no está para nada definida ni ganada para uno u otro candidato. Sin embargo, el candidato Massa ha avanzado unos buenos pasos para vencer a Milei.

 

Tanto Milei como Massa necesitan ampliar su caudal de votos y alianzas políticas. Como era de prever, parte de la Coalición JxC en los días posteriores a la elección manifestaron su pleno apoyo al candidato Milei, dejando en su interna un desastre político severo, puesto que muchos adherentes de Bullrich, no están dispuestos a votar por la ultraderecha. Milei ha hecho declaraciones, quizás no tan destempladas como acostumbraba hacer previo y pos PASO. Pero ha reafirmado aspectos centrales de lo que podría llamarse un “programa” de gobierno, como la disolución del Banco Central, la disminución de ministerios y la dolarización de la economía. Incluso en su propio polo de apoyo, estas medidas son severamente cuestionadas debido a su inviabilidad. Interesante es destacar su comportamiento en una reciente entrevista en TV A24 donde se lo vio totalmente desbordado, perturbado, y punto de quebrarse emocionalmente.

Por su parte Massa profundizando su estrategia de un gobierno de Unidad Nacional, puesto que, en su opinión, esto es lo que Argentina necesita para enfrentar los profundos desafíos políticos y económicos actuales. En este sentido va convocando a otras fuerzas del espectro político y social de la nación, como radicales de la Unión Cívica Radical, sectores de la Propuesta Republicana (PRO, partido político cuyo líder es el ex presidente Macri, que no están de acuerdo con el apoyo a Milei, sectores empresariales, de gobernadores e intendentes que ven en Massa la mejor opción de poder parar a la ultraderecha en Argentina.

Es cierto, que hasta que no se cuente el último voto en el balotaje nada estará dicho de quién será el próximo presidente de la nación argentina. Lo concreto, es que el caso argentino mostró una resiliencia política destacable del peronismo y las fuerzas políticas democráticas. El objetivo central, es enfrentar de manera conjunta los grandes desafíos que la sociedad argentina debe urgentemente abordar y, frenar en lo inmediato la ofensiva de la ultraderecha trasandina.